Mazatlán, Sinaloa; noviembre 29 del 2020.- No toda la culpa es de la Junta Municipal de Agua Potable y Alcantarillado, sino que puede ser de la dueña de la casa que quiere desalojar a la inquilina Villas del Rey.
La señora la casa no ha podido ser desalojada y todo indica que no importa que su estado de salud sea grave y se canceló el contrato de agua y drenaje, quizás en un intento de obligarla a desocupar el inmueble.
Información hecha llegar a esta página de noticias indica que hubo una demanda para sacarla de la casa, pero un juez negó la autorización.
Como inquilina habría dado diez mil pesos a la propietaria por concepto de renta, pero esta no entregó ningún recibo a cambio y de ahí surgió el conflicto.
Es posible que la JUMAPAM haya sido utilizada. El recibo de agua de septiembre era de aproximadamente 240 pesos y por tres meses no amerita corte, ni reducción, sino alguna visita para recordar que hay un adeudo.
Personas cercanas a la que renta el domicilio aseguran que en estos momentos ya no hay agua en el tinaco temen que la insalubridad deteriore más la salud de la mujer. Fue operada del corazón en fechas recientes y además se contagió.
Se cree que la Junta de Agua cumplió con el cierre al no contar con un contrato y pudo no estar enterada de la enfermedad de la quien ocupa la casa y quien busca el desalojo solo aprovechó el momento para tratar de obligarla a salir, pero esta aunque quiera no puede abandonar el domicilio por su condición física.
Pero mientras el juez decide, piden hacer la reconexión, porque si sucede algo serían responsables directos por dejar sin esos dos servicios básicos a la mujer.
